martes, 20 de diciembre de 2011

Paradojas


-Tenemos edificios más altos, pero menos tolerancia.
-Gastamos más, pero tenemos menos; compramos más, pero disfrutamos menos.
-Tenemos más educación pero menos sentido común.
-Hemos aprendido cómo ganarnos la vida, pero no a vivirla más plenamente.
-Hemos agregado años a nuestra vida, pero no vida a nuestros años.
-Hemos ido y regresado a la Luna, pero tenemos más dificultades para saludar a nuestro vecino.
-Deseamos conquistar el espacio exterior, pero no el espacio interior.
-Existen muchas redes sociales, pero va desapareciendo la comunicación directa.
-Existen muchos medios de comunicación, pero es cuando más desinformados estamos.
-Estos son los tiempos de paz mundial, pero violencia doméstica;
-Más tiempo libre, pero menos diversión, nos cansamos antes.
-Más tipos de alimentos, pero menos nutrición.
-Estos son días de dos ingresos, pero más divorcios.
-Es un tiempo en el que hay mucho escaparate, pero nada en el depósito;
-Un tiempo en el que la tecnología puede llevarte estos buenos días a tu buzón y un tiempo en el que puedes escoger ser diferente, o simplemente darle a la tecla “eliminar”

martes, 13 de diciembre de 2011

Navidad es tiempo de regalos

Navidad es tiempo de regalos. Con frecuencia nos devanamos los sesos para buscar regalos originales. Y a veces tan sólo conseguimos gastar dinero en cosas extravagantes. Existe otra forma de hacer regalos, menos costosa en lo económico; más interesante en lo humano.

He aquí algunos regalos que puedes hacer estas Navidades y que, además de no costar nada, son extraordinarios y te los van a agradecer más.

- El regalo de escuchar. Pero realmente escuchar, sin interrumpir, bostezar o criticar. Sólo escuchar. Y si te pones en el lugar de la persona que te cuenta sus problemas o preocupaciones, lo estarás haciendo de forma genial.
- El regalo del cariño. Ser generoso con besos, abrazos, una palabra amable, un apretón de manos. Con estas pequeñas acciones demuestras el cariño por tu familia y amigos.
- El regalo de la sonrisa. Llena tu vida de imágenes con sonrisas, dibujos, caricaturas, y tu regalo dirá «me gusta reír contigo»
- El regalo de una nota escrita. Puede ser un simple «gracias por ayudarme». Un detalle así puede ser recordado toda una vida, inclusive cambiarla.
- El regalo del reconocimiento. Un simple, pero sincero «estás guapísima con ese vestido»; «has hecho un gran trabajo»; «sin tu ayuda nunca hubiera terminado esta tarea»; «fue una cena estupenda»... pueden convertir en especial un día ordinario.
- El regalo del favor. Todos los días procura hacer un favor. Y pedir las cosas «por favor».
- El regalo de la gratitud. Una manera de hacer sentir bien a los demás es decir cosas como: «muchas gracias»; «qué suerte tenerte cerca».

martes, 6 de diciembre de 2011

Compartimos todo

Una pareja de ancianos entró a un local de Mc Donald’s y se sentó junto a una mesa donde unos jóvenes estaban cenando.
El anciano se acercó a la caja e hizo su pedido. Luego, desenvolvió la hamburguesa, la cortó por la mitad y puso una mitad junto a su esposa; con mucho cuidado, contó todas las patatas fritas e hizo lo mismo. Metió dos pajillas dentro del refresco y lo puso entre él y su esposa. El anciano empezó a comer su media hamburguesa, la gente se le quedó mirando con compasión.
Un joven del grupo cercano a ellos, se les acercó y, educadamente, les ofreció comprarles otra ración de comida.
El anciano respondió que no se molestara, que estaban acostumbrados a compartirlo todo. La gente se dio cuenta de que la anciana no había probado bocado, sólo miraba como comía su marido y, de vez en cuando, bebía un poquito del refresco.
El joven se acercó otra vez y les repitió su oferta. Esta vez fue la anciana la que le explicó que no, que ellos estaban acostumbrados a compartir todo.
El joven entonces le preguntó a la anciana: ¿Y usted por qué no come, qué está esperando?
La anciana le respondió: ¡¡¡Los dientes!!!